lunes, 14 de agosto de 2023

Salmo 3 - A Ti Vengo a Causa de Mis Enemigos

Un aporte a la titánica tarea. Una adaptación libre de un servidor al idioma con el que cantaban mis padres desde que Dios me tejía en aquel vientre.


 A ti vengo

Hoy, oh, Dios, a causa de cuanto

Estos, mis adversarios, se han multiplicado.


Muchos tengo

En contra de mí; por lo tanto

Se han levantado, y en voz alta se han burlado.

De tu altura

Oye, que su habla es dura:

"Dios lo ha abandonado", "no será en Dios salvado".


Mas yo sé que

Eres escudo a mi alrededor.

Eres mi gloria, y el que mi cabeza levanta.

Cuando clamé

(Pues a Dios llamé en mi dolor),

Me llegó desde su monte santo su respuesta.


Yo me acosté,

En paz, porque en Él confiaba.

Dormí, y desperté, pues mi Dios me sustentaba.

Levántate

Oh, Altísimo, poderoso;

A ti clamo, oh, Dios, a salvarme ven presuroso.


Pues venciste,

Los heriste en la mejilla.

Has demostrado que Dios al altivo humilla.

Atacaste,

A los perversos humillaste,

Caíste sobre ellos, sus dientes quebrantaste.


La salvación

Sólo a ti te pertenece;

Sobre tu pueblo sea, Señor nuestro, tu bendición.



Dejo también el Salmo 3 para comparar:

¡Oh Jehová, cuánto se han multiplicado mis adversarios!

Muchos son los que se levantan contra mí.

Muchos son los que dicen de mí:

No hay para él salvación en Dios. 

Selah


Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí;

Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.

Con mi voz clamé a Jehová,

Y él me respondió desde su monte santo. 

Selah


Yo me acosté y dormí,

Y desperté, porque Jehová me sustentaba.

No temeré a diez millares de gente,

Que pusieren sitio contra mí.

Levántate, Jehová; sálvame, Dios mío;

Porque tú heriste a todos mis enemigos en la mejilla;

Los dientes de los perversos quebrantaste.

La salvación es de Jehová;

Sobre tu pueblo sea tu bendición. 

Selah