Un aporte a la titánica tarea. Una adaptación libre de un servidor al idioma con el que cantaban mis padres desde que Dios me tejía en aquel vientre.
A ti vengo
Hoy, oh, Dios, a causa de cuanto
Estos, mis adversarios, se han multiplicado.
Muchos tengo
En contra de mí; por lo tanto
Se han levantado, y en voz alta se han burlado.
De tu altura
Oye, que su habla es dura:
"Dios lo ha abandonado", "no será en Dios salvado".
Mas yo sé que
Eres escudo a mi alrededor.
Eres mi gloria, y el que mi cabeza levanta.
Cuando clamé
(Pues a Dios llamé en mi dolor),
Me llegó desde su monte santo su respuesta.
Yo me acosté,
En paz, porque en Él confiaba.
Dormí, y desperté, pues mi Dios me sustentaba.
Levántate
Oh, Altísimo, poderoso;
A ti clamo, oh, Dios, a salvarme ven presuroso.
Pues venciste,
Los heriste en la mejilla.
Has demostrado que Dios al altivo humilla.
Atacaste,
A los perversos humillaste,
Caíste sobre ellos, sus dientes quebrantaste.
La salvación
Sólo a ti te pertenece;
Sobre tu pueblo sea, Señor nuestro, tu bendición.
Dejo también el Salmo 3 para comparar:
¡Oh Jehová, cuánto se han multiplicado mis adversarios!
Muchos son los que se levantan contra mí.
Muchos son los que dicen de mí:
No hay para él salvación en Dios.
Selah
Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí;
Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
Con mi voz clamé a Jehová,
Y él me respondió desde su monte santo.
Selah
Yo me acosté y dormí,
Y desperté, porque Jehová me sustentaba.
No temeré a diez millares de gente,
Que pusieren sitio contra mí.
Levántate, Jehová; sálvame, Dios mío;
Porque tú heriste a todos mis enemigos en la mejilla;
Los dientes de los perversos quebrantaste.
La salvación es de Jehová;
Sobre tu pueblo sea tu bendición.
Selah